Hemocromatosis: sobrecarga de hierro
Signos, diagnóstico y tratamiento
La hemocromatosis, también llamada sobrecarga de hierro, prueba de ferritina es un problema identificado por una acumulación excesiva de hierro en el organismo. Este post ofrece detalles sobre los signos y síntomas, el diagnóstico y el tratamiento de la hemocromatosis.
Síntomas
La hemocromatosis suele ser asintomática en aproximadamente el cincuenta por ciento de las personas. Los signos y síntomas suelen manifestarse en los varones entre los 30 y los 50 años, mientras que las mujeres pueden experimentarlos después de los 50 o durante la menopausia. Los síntomas más típicos de la hemocromatosis son:
- Dolor articular, especialmente en los nudillos.
- Agotamiento
- Reducción inexplicable de peso
- Pigmentación bronceada o grisácea de la piel
- Malestar estomacal
- Disminución de la libido
- Caída del cabello
- Palpitaciones
- Problemas cognitivos
En muchos casos, los signos y síntomas pueden no aparecer hasta que se establecen complicaciones, como cirrosis hepática, problemas diabéticos, ritmos cardíacos anormales, inflamación articular o disfunción eréctil. Hay que tener en cuenta que un consumo elevado de vitamina C o de alimentos ricos en vitamina C puede empeorar la hemocromatosis debido a su función en la absorción del hierro.
Diagnóstico médico
El diagnóstico médico de la hemocromatosis puede ser difícil, ya que sus signos se solapan con los de otros problemas. Las empresas sanitarias pueden considerar la posibilidad de realizar un cribado si:
- Existen síntomas.
- Hay antecedentes familiares de hemocromatosis.
- Se observan otros problemas relacionados.
- Existen varias técnicas de diagnóstico que ayudan a confirmar la hemocromatosis:
- Evaluación detallada de la historia clínica, incluidos los antecedentes familiares y también los signos y síntomas relevantes.
- Examen físico, que consiste en la palpación de diversas partes del cuerpo, así como el uso de un estetoscopio.
- Análisis de sangre, como la saturación de transferrina y los niveles de ferritina del producto, que proporcionan información importante sobre los niveles de hierro y su almacenamiento.
- Pueden sugerirse pruebas genéticas si los análisis de sangre preliminares muestran niveles elevados de hierro.
- Biopsia hepática, que consiste en la extracción de un ejemplo de células diminutas para analizar los daños hepáticos.
- Imágenes por vibración magnética (IRM) para visualizar la participación de los órganos corporales.
Terapia
Para las personas con hemocromatosis primaria, el tratamiento se centra en las extracciones de sangre normales para reducir al mínimo los niveles de hierro y también prevenir las dificultades. Este procedimiento se parece a la aportación de sangre, en la que se coloca una aguja en una vena para lesionar, que después se recoge en una bolsa.
La terapia suele constar de dos fases:
- Tratamiento inicial: se extrae sangre una o dos veces por semana para reducir los niveles de hierro, con aproximadamente medio litro de sangre atraído por sesión.
- Terapia de mantenimiento: En cuanto los grados de hierro se han normalizado, se extrae sangre con menos frecuencia, en función del precio de la reacumulación del hierro en el organismo.
El tratamiento correcto de la hemocromatosis ayuda a detener los daños en los órganos corporales, así como a mantener la salud total. Comprender la hemocromatosis, una afección por sobrecarga de hierro, es fundamental para reconocer sus síntomas, detectar la enfermedad con precisión y aplicar métodos de tratamiento eficaces. El control rutinario de los niveles de hierro y el cumplimiento de los planes terapéuticos son cruciales para las personas con hemocromatosis.Si experimenta síntomas o está preocupado por su salud, póngase en contacto con un profesional médico de inmediato.